miércoles, 5 de noviembre de 2008
Me encuentro... desaparecida
A veces me pregunto si me corresponde o es por simple azar.
He empequeñecido a pasos agigantados; lo que creí superado, sólo era puro engaño, y los fantasmas vuelven a llamar a mi puerta. Sé de ellos, saben de mí y pienso que es grosero vedarles la entrada...
Me negué sentir de verdad, durante muchos años.
...una mano como venda en los ojos (a veces dejándome curiosear); la otra sobre mis labios...
Negué y me negué.
Distancia prudencial, sinónimo de control y seguridad.
Preferí asomarme, arriba, arriba, arriba desde mi globo, sobrevolando las áreas de mi vida, entornos, etapas, bienvenidas y despedidas... lejos de posibles flechas envenenadas, lejos de sufrimientos completos... una y no más...
Me derribaron y caí...
Me obligaron a pisar en suelo firme, a concebir la vida íntegramente...
Sólo alcancé a correr hacia un bosque, donde me perdí...
Ahora...
Continúo perdida, sin rumbo... sintiendo demasiado... asustada y negándome aquello que aún puedo controlar...
Y duele tan profundo...
"...me siento frágil, disperso como mantequilla untada sobre demasiado pan..."
---gracias por ese ratito hecho palabras... yo... no encontré las apropiadas... mil y un besos, junto con un pensamiento de ti, junto con una sonrisa al viento que espero te encuentre cada mañana, tal y como te dije, aunque mi comportamiento deje que desear... lo siento...---
sábado, 27 de septiembre de 2008
regreso...
resultó... extraño? sí, supongo que fue un tanto raro; sentí desconcierto y suspense respecto a lo que mi condición representaba en ese entorno, en ese lugar que estaba reservado a mí... sentí un escalofrío de fuerza y resultó tan impactante que perdí el conocimiento, ignoré la desesperanza y recordé el modo de sonreir que olvidado se quedó en el camino...
desde ese momento, ese día... he negado, he obviado... miradas... llamadas... mensajes... he necesitado (antes y ahora) de ese tiempo egoísta aunque si he de ser sincera, me ha sido y me es imposible descolgar el auricular... en ese aspecto me debilito... me he dedicado a intentar crecer, a poner empeño y esfuerzo en desaprender y reaprender en constructivo... aún y todo sigo poco a poco desapareciendo... cada vez menos, menos, menos... más menos, más nada...
la nada...
madurar...
comenzar partiendo de un tiempo vivido...
compartido...
sonrío al mirar a mi derecha...
ten paciencia...
viernes, 12 de septiembre de 2008
en este día que se antoja tu vuelta caprichosa...
Me cansé de tirar piedras a mi tejado... ahora, las tiro contra el tuyo, intentando no romper, no hacer ruido, no molestar... y, sin embargo, queriendo dejar constancia de mi paso por tu lugar...
Desconcertada y con un peso similar a sucedáneo entre odio y tristeza, intento verte... mis ojos, apenas distinguen un halo de niebla a través de cortinas de gotas de lluvia.
Te irás?... cuándo?
Sólo gorgojeos en atardeceres ventosos ya quedan... y, con todo, espero que permanezca tu recuerdo...
Me percaté ayer, mientras pretendía deshojar una rama desnuda de mi árbol, en esta época casi marchito, conteniendo una mínima razón de vida latente, hiberna...
Fuiste primavera que logró deshacer lentamente el hielo invernal que me cubría...
Hoy, produces escarcha en mi piel.
Así que...
No me sirves, no te sirvo... no somos más que piezas de distintos puzzles...
miércoles, 10 de septiembre de 2008
suspiros de cometas al viento...
Reflejo de un momento único y para dos... en un instante exacto, en un tiempo indefinido, contra corriente y dejando llevar hasta el mismo horizonte.
Llegar aprendido y volver sin lastres; adivinar imposibles y obviar lo visible, paladeando sorbos de inestabilidad con los pies desnudos en las nubes...
Tener temiendo perder, un sol que no ciega sino que ilumina y acaricia con rayos límpidos la nuca en donde se acomoda un principio de quietud.
Mirarme y mirarte... intercambio sin palabras... sueños utópicos, ideales en restauración...
Bocados de sonrisas guardados en arcones y rescatados en limpiezas ocasionales…
Eres y dejo de ser… viceversa… y ambos, inseparables.
domingo, 7 de septiembre de 2008
Levanta y anda...
Quien algo quiere... le costará... y si cuesta otener aquello que tanto se ansía, vale y valdrá la pena el esfuerzo. Impaciencia... suele ser habitual, del mismo modo que a su vez es inservible... el descanso que ofrece la superación y de la conciencia de uno mismo... Pero... si se tropieza... es más sencillo dejar el rostro contra el asfalto, olor a derrota... saturado y penetrante, sabor a inutilidad que se paladea tan lentamente que se vuelve pastoso e impide que pruebes otras variedades, salvo sus propias variantes... color de la tristeza, oscuro, que ciega como nube de polvo todo lo que no sea autocompasión... y es cuando escuchas los infinitos "por qué a mí" ... y vuelves al olor del fracaso. Es engaño, sólo tuyo... una lucha contra ti que ya la das por perdida. Por qué a mí? Sencillamente porque eres capaz y necesitas fortalecerte. Es entonces cuando el viaje, tu viaje, comienza. Y se inicia con sólo desearlo. Querer conocer qué más hay además del asfalto que tan bien conoces. Quizá un cielo azul? Supongo que es un comienzo...
Y subí a mi montaña. Admiré con miedo y fingido desinterés mi alrededor y, tras un instante de titubeo, reuní valor suficiente para trasladar la vista hacia mi interior... encontré caos... maraña de aspectos, madeja de sentimientos y baile de máscaras en un momento íntimo. Toda la incomodidad de un paseo con un desconocido... de los hirientes zarzales a la calma hierba de primavera... quizá algún día... cuando confíe que hay más aparte del asfalto al que vivo anclada. Cuando recupere mis sentidos para comprender la novedad? Mejor apreciar la novedad adquiriéndolos poco a poco... saber saltar al vacío es empezar...
martes, 12 de agosto de 2008
domingo, 10 de agosto de 2008
anestesia frente al dolor...
lunes, 4 de agosto de 2008
me faltas...
Apenas contabas con semanas de vida...
Te desparasité, vacuné y fui curando esas heridas que tenías y que con la suciedad que llevabas encima estaban ocultas. Claro, tuve que darte un baño y para mi asombro te encantó... en ese instante apareció tu verdadero pelaje, y comenzaste a ser tú...
Aún me vienen a la memoria aquellas madrugadas sin fin cuando te preparaba biberones, de contar las horas entre toma y toma, de regañarte y educar tus maneras... fueron tiempos de sueño y cabezadas frente a la televisión...
Cada mañana me levantaba con la ilusión de verte, de alzarte en el aire, de abrazarte y notar el calorcito de recién salido entre mantas. Más adelante eras tú el que venías a despertarme, poniéndote sobre mi barriga puntualmente a las 7.
Creciste fuerte, sano y conservando el carácter rebelde que supiste desarrollar en apenas 50 metros cuadrados. Tuviste paciencia con nosotros los humanos... fuiste amigo, familia, orador, alegría en mis alegrías, guardián de mis lágrimas, supiste escuchar y también aconsejar... me diste tus buenos ratos y me desesperaste con tus manías... fueron años muy especiales para mi, estuviste siempre a mi lado...
Sabes? no existe ser que mirándome a los ojos supiera lo que en esos momentos necesitaba...
excepto tú...
Ahora, mis ojos se inundan de lágrimas recordándote... resbalan por mis mejillas... me cuesta seguir... mucho... siento pena, dolor, silencio... y culpabilidad...
Qué difícil cuando te ponen entre la espada y la pared... porqué me hicieron elegir? te sacrifiqué por amor y en ese momento sé que me crucifiqué.
Creo que jamás he sufrido tanto con una despedida... te abracé durante minutos interminables, te miré y hablé por horas... lloré, imploré, grité en silencio... ese día no comí, sólo me agazapé en un rincón y me quedé así por tres días...
Sé que ahora vives libre, con otros de tu especie... que puedes saltar setos y cazar a tu antojo lo que entre cuatro paredes no pudiste sino soñarlo.
Muchas veces pienso en ti y sonrío porque estás bien...
Pero ahora que escribo no puedo evitar sentir esta opresión, no puedo detener esta catarata de lágrimas y de añoranza por ti... necesitaba plasmarlo, necesitaba convencerme que no fui egoísta dejándote ir... sólo espero verte una última vez antes de que te vayas definitivamente, algún día...
Te quiero por siempre mi fiel amigo...
sábado, 2 de agosto de 2008
ven...
esta noche no tendré que apretar contra mí las sábanas echando de menos... no diré buenas noches al aire... ni me quedaré dormida recordando...
cuando cierres esos ojitos tan lindos, te besaré en la frente, en la nariz, en los labios... así, tu carita en mis manos... y cuando te des la vuelta, pasaré mis brazos por tu cintura, mis manos se entrelazarán en tu pecho... acomodaré mi cabeza en tu espalda y así me dormiré.
ven... sólo esta noche... quédate junto a mi...
... te necesito tanto...
(...escrito hace unos cuantos años ya...)
viernes, 27 de junio de 2008
de cuando en cuando...
A veces, cuando me bullen muchas ideas, sueños, historias para no dormir... lo mejor que puedo hacer para jugar al escondite con mis sentimientos (muchas veces veo necesario reiniciar mi sistema, porque se queda bloqueado) es, además de dibujar... leer.
Me encanta... aunque también acabo volando entre las nubes, inventando mi propio cuento, y desde luego, no hace el efecto deseado de anestesiar mi mente con tinta impresa. Creo que lo tiene bien aprendido la puñetera y sabe esquivar esos intentos de indiferencia hacia ella.
martes, 24 de junio de 2008
lo que parece una tontería, puede servir de mucho...
Llevaba a un amigo a casa porque tenía algo importante que hacer y la lluvia era constante, engorrosa y su compañero el viento estaba presente.
Y él, con quien pocas veces he cruzado conversaciones interesantes o, simplemente conversaciones, me comentaba:
él: vaya, tienes muchos lunares...
yo: (ya tuvo que salir el temita) sí, y la cara se me llena de pecas en verano... en fin...
él: eso está bien
yo: bien? pero niñooo, no sabes lo que dices, no me gusta... siempre he tenido complejo
él: complejo de qué?
yo: joo, pues... tantos lunares... me gustaría tener una piel sin nada de eso, sabes? y ponerme morenita... pero noo, blanquita y con lunares...
él: bueno, jaja, ya ves que siempre anhelamos lo que no tenemos... además es como si estuvieras tuneada, eh?
yo: si... pero bueno, que ahora lo acepto y punto... (estooo... tuneada? joé, anda que este chaval lo flipa -creo que puse cara de circunstancias-)
él: de todas formas... quién quiere un coche normal, pudiendo tener uno tuneado? tú eres más linda así, con tus cosillas, no crees?
yo: (sonreí... y ya no pude decir nada más).
La vida muchas veces te sorprende... pero más aún las personas, desde luego...
Ah! la sonrisa me duró todo el día y, cada vez que lo recuerdo, siempre vuelve a mis labios...
Un besito...
lunes, 23 de junio de 2008
hoy te vi...
Como siempre tarde... miro el reloj acusador, recordándome que me había prometido llegar a mi lugar de destino a las 12 en punto... y ya eran las 11:30... soy un desastre y no tengo remedio, me repito mientras de forma automática cojo las llaves y cierro la puerta tras de mi... creo que mi subconsciente ya está organizado de esa forma y que, aunque quiera cumplir mis planes, todo seguirá su rutina de diario, me levanto con tiempo... y no llego cuando me lo propongo...
Será porque lo tengo grabado en mi cabeza... sé que tú estarás ahí, donde siempre, a tu hora... y yo, cuadro mis horarios para coincidir.
Sin pensar, abro el coche, dejo el bolso y la chaqueta en el asiento del acompañante y según me acomodo y cierro, ya me encuentro a salvo.
Extraña sensación.
Y también, me digo la misma frase de... bueno, vamos allá... en fin, me pongo mi música, que elijo para cuando me cruce contigo, mayor estupidez... pienso... total para qué, bueno y siguen un sinfín de pensamientos dirigidos al vacío.
Arranco y tarareando conduzco mi coche (me gusta decir que es un coche adolescente, por sus 13 años) y vamos llegando, no al destino final, sino al objetivo importante dado el caso. Semáforo rojo. Bien, así aprovecho y me recojo el pelo, porque estaré mejor, o sino... espera, me lo dejo suelto? ay no sé... y así, pasa que tocan el claxon porque se ha puesto verde y yo sigo preguntándome si suelto o recogido y hablando sola... soy un caso...
Recto y segunda salida en la rotonda, es tan lógico, a pesar de que el camino sea más largo de esta forma, pero qué más da...
Otro semáforo en rojo y esta vez no pienso en el pelo, ni en la ropa... sólo en llegar y verte... quizá, porque no es seguro tampoco.
Verde, ay, ya están los nervios... pero qué tontería, no? nervios de qué? pues ni idea (bueno, miento, sé de qué son, pero me niego a aceptarlo).
Voy llegando y mis ojos te buscan mientras aminoro la marcha... y allí estás... tan guapo, mira, hoy te has puesto ese pantalón que te queda tan bien... y el pelo aún mojado de la ducha de la mañana... si en ese momento cerrase los ojos, te tendría delante, a ti, a tu olor, tu calor, un abrazo...
Esta vez tienes que cruzar el paso de peatones y yo te cedo y como muchas otras veces, haces el gesto con tu mano derecha de gracias... es ese instante donde nuestras miradas coinciden, acompañadas de una sonrisa un tanto tímida... y después... tú continúas tu camino y yo mi marcha.
Simplemente con eso, sé que el día merece la pena, a pesar de lo que pueda ocurrir, y sé, que mañana tú estarás ahí a tu hora y yo cuadraré mi tiempo para verte...
sábado, 21 de junio de 2008
un universo de pequeñas cosas...
Cuántas pequeñas cosukas guarda la vida... para cada uno, son distintas, algunas existen en alguien, otras son vivencias en otro...
Unas pequeñas cosas con las que disfruto plenamente:
- aspirar con hondura el aroma del pan recién hecho hasta el punto de embriagarte con él e imaginar los campos de trigo
- apoyar tu carita sobre un cristal y sentir el frío material, casi fundiéndose con tu piel hasta el punto de tocarte con la mano y no notarla
- tomar un puñado de arena en tu mano y ver que se escapa, escuchar el susurro de su caída con los ojos cerrados
- sentir cómo se funde un copo de nieve sobre la nariz y a la vez de frío, sentir que quema
- ver llover a través el cristal, cómo las gotas caen en cascada y con un dedo perseguir una de ellas adivinando su trayectoria
- salir al jardín después de la lluvia a disfrutar de las gotas d lluvia que perlan las plantas y sacar fotografías de ellas
- dar un paseo por el monte y abrazar un árbol, notar su corteza rugosa y oler la resinosa fragancia que desprende
- hundir la mano despacito en un saco de legumbres
- mirar hacia atrás durante la película y ver la cara de la gente
- un abrazo dado con cariño a esa personita tan especial que nos guía con su saber y que nos entrega todo en ese instante
- observar a alguien y pensar... cómo será su sonrisa? y cuando se enfada? cómo será su voz? cuáles son sus sueños?
- ver acercarse a un gatito, tenderle la mano y notar su pelaje suave... cogerlo entre tus manos, hundir la nariz en él y dejar que su pelo te haga cosquillas hasta reírte mucho
- una mirada intensa... ver unos ojos lindos que hablan sin unsar palabras
- beber un vaso de leche y, en vez de limpiarte, ir a mirarte en el espejo
- andar sobre la hierba recién cortada y húmeda del rocío de anoche
- pintar un óleo sin patrón, siguiendo las directrices que te indique el estado anímico
- reírte hasta el punto de dolerte la barriga
- mirar por el microscopio cualquier objeto... (hielo, sal, manzana, cebolla, pelo...)
- cuando hay tormenta por la noche, coger una manta y un chocolate calentito y arrebujarme frente a la ventana
- soñar despierta
- meterte en la bañera con ropa, sólo por ver qué se siente y notar cómo pesa la ropa mojada puesta
un besito...
miércoles, 18 de junio de 2008
lunes, 16 de junio de 2008
...y si uno no se ayuda?... carta para ti...
Cuando una personita a quien tengo un aprecio enorme, a quien quiero con todo mi corazón, sufre, comparto su carga.
Sé que está en el fondo de un bache, sé que no se despega de su pasado... de su vida que lo acompaña cada día, como un saco de piedras a la espalda... es su carga, es mi carga... en mi se mezclan sentimientos confusos de rabia, impotencia, necesidad de dar todo por él, incluso culpa por no tener la sapiencia necesaria para saber entregarle aquello que necesita para salir adelante.
Porque lo que vale para uno, no sirve para el otro.
Quizá... o puede que si se hace un esfuerzo puede darle el empujón que requiere la situación.
A lo que me refiero es que, si es una persona cercana, bueno... le animas a salir, le sacas a veces obligado de su refugio de falsa seguridad... y piel con piel, juntos, existe un intercambio de complicidad también física. Es un "te veo" que me ayudas.
Pero... en el caso de una persona a la que no he visto físicamente... amigos de distancia... se hace más cuesta arriba, digamos que prácticamente se forma un talud vertical... tan difícil de subir a pie que hay que cambiar la táctica y limitarte a escalarlo.
Cómo se escala a su corazón? cómo puedes llegar a la cima de su sentimiento?
Y cómo se explica un abrazo? se describe? cómo y de qué modo se concretizan en palabras los sentimientos, las sensaciones?
Te puede llegar la fuerza de alguien al otro lado del ordenador... yo diré que si, que noto la energía que muchas veces me envían.
Pero... no siempre es suficiente, de hecho en este caso que menciono, no lo es.
Cuánta rabia interior... no me gusta sentirme así... no, porque la pelota pasa a mi bando y es entonces cuando me encuentro débil y frágil... a veces ignorante, otras perdida. No saber reaccionar de manera constructiva. Tristeza...
En este caso, cualquier palabra, frase bonita, consejos bienintencionados que pueda darle le sonarán a canción vieja... y veo que lo mejor es callar.
Todos podemos saber la teoría, verdad? y en la práctica las tornas cambian y sientes que no sabes nada, que no va contigo lo aprendido.
La personita en cuestión... es, muy especial... un tesoro lleno de valiosas joyas y él entero un diamante en bruto...
Es tan sentido que no olvida, no pasa página, y su presente se transforma en su pasado y no vive... espera... a qué?
Nadie vendrá a salvarte... acaso tú mismo tienes la última palabra en tu lucha.
Si esperas ese algo que sabes que llegará, ves pasar los días, semanas, meses... delante de ti y tu vida se derrama...
Y cuando llegue... posiblemente te refugies en eso y pretendas aparcar lo que ahora sufres... pero no habrá sido superado.
Obligarse? es una opción, te fuerzas, esfuerzas y refuerzas a hacer pequeñas cosas... no para desconectar precisamente... sino para volver a ser partícipe de la vida. Salir un rato, quedar con alguien a tomar algo, realizar una tarea que te guste, un hobby (si no tienes, lo buscas)...
También es interesante tener en cuenta la ayuda profesional si puedes servirte de ella, es un apoyo...
Pero, esencialmente, tiene que salir de ti mismo.
No puedes pasarte día tras día sumido en tu burbuja, no queriendo desprenderte del pasado, del dolor asfixiante en tu corazón.
Te sientes solo... pero no ves acaso que estás rodeado de personas que velan por ti, tu familia, amigos, compañeros... yo.
Sé que eres así... no debes cambiar, sabes que no... pero tienes que mejorar, hacerte un poco más fuerte y dejar de mirar el suelo.
Bueno, vale, puede que así, mirando el asfalto estés seguro, evites que te hagan daño, sufrir... te quedas ahí, en tu burbuja...
Pero, sabes? te pierdes los colores del mundo, te pierdes ese cielo azul, esa gaviota que sobrevuela el mar, la sonrisa de un niño... te pierdes la vida completa.
Sufrir está a la orden del día... es parte de la existencia, se acepta así, la probabilidad de un posible varapalo que te puede venir.
Pero también tiene cosas preciosas...
Acaso vas a perderte una rosa, la suavidad de sus pétalos, su fascinante aroma, la propia belleza... por las espinas que pueda tener su tallo?
domingo, 15 de junio de 2008
Buscando mi trébol de más de tres hojas...
Un día, según me desperté, sentí ganas de ver qué tiempo hacía... salté de la cama y descalza recorrí el pasillo sintiendo el frío parquet bajo mis pies y dándonos un abrazo el pijama y yo; acompañándonos al paseo venía un bostezo.
Me dirigí hacia la ventana más prometedora de la casa, donde se puede admirar el jardín. La abrí de par en par sintiendo el fresquito de las siete de la mañana... el gran árbol de mimosa me saluda dorado, con ese embriagador perfume que la mañana reparte entre los edificios vecinales.
Observé los rosales apreciando las gotas de rocío en sus pétalos, en sus hojas... admirando el verde perlado de lágrimas... preciosa perspectiva.
Sin pensarlo dos veces, tomo una manzana que muerdo y la sostengo mientras me visto rápido, una camiseta, pantalón... espera que voy en zapatillas de casa, no, mejor unas deportivas, si? ^^ Con mi desayuno a medio terminar, salgo al jardín y me siento sobre la hierba mojada... y claro, no puedo evitarlo y me echo lo larga que soy... mmm vaya! no recordaba que la cortaron ayer... una delicia, huele a verde, a verde mojado que hace cosquillas en mis brazos desnudos... qué bien se está!
Giro mi cabeza y entonces los vi... sin apartar la mirada el giro de mi cuerpo siguió al inicial de mi cabeza y me quedé boca abajo con la cabeza ladeada, bañada por la humedad, observándolos...
Me acerqué al grupo y comencé a contar... tres, tres, tres... vaya, cada uno tenía tres hojas...
Entonces recordé cuando era más pequeña, tendría 10 años... que solía mirar tréboles también, y mi abuelo me enseñó que podía encontrar alguno de más de tres hojas... un nuevo reto, me dije entonces... un día tras otro al salir del colegio me ponía a buscar... y al final lo encontré, bueno, encontré dos; de cuatro hojas y de siete... de siete? pero acaso existían? si, parece ser que sí...
Por esto, persistí en mi empeño... quería encontrar uno de más de tres hojas.
Al final... después de un buen rato, pasaron unas señoras mayores cogidas de la mano, creo que susurrando... y me preguntaron "has perdido algo guapa?". Parecía que debía tener una concentración tal que daba esa impresión... ^^
Yo les contesté "perdido? no... pero si aún no lo he encontrado..." es que vaya preguntas que hace la gente a veces... y se fueron murmurando algo como "esta juventud, algún día verá..."
Al final desistí... no encontré ninguno... me puse en pie y me di cuenta que había secado con mi ropa el manto de hierba.
Subí corriendo a casa y me cambié, colocando la ropa sobre el radiador...
Y ahí estaba...
El trébol!... bueno, más bien la silueta de él, dibujada con el agua que había absorbido la camiseta... vaya, eso sí es una sorpresa ^^
Y ahí me quedé, viéndolo desaparecer lentamente...
A veces no nos damos cuenta que lo que buscamos con ahínco, puede estar cerca de nosotros y no verlo.
Dentro nuestro tenemos la mayor riqueza, la mayor fuerza y poder... y a veces, nos pensamos pobres, débiles... y no es así, ya que si abriríamos los ojos interiores veríamos nuestra verdadera valía... si es que, somos maravillosos tal cual.
sábado, 14 de junio de 2008
...y llegó...
en silencio, despacito... apareció en mi vida.
Qué persona más linda, capaz, tan hermosa por dentro y por fuera...
me quedé... (sin palabras)...
Será el destino? la casualidad?
Opino que no es así, que todo ocurre por alguna razón.
Sin yo pedirlo (voz ahogada), él entró en mi vida.
Llenó de luz mis ojos y de claridad mi mente.
Secó mis lágrimas de tristeza, hizo surgir nuevas de alegría.
Da sin esperar nada... comparte sin querer recibir.
Dice que es igual a todos...
sin embargo...
es un ángel caído del cielo,
es especial...
Yo...
siento por él un mundo,
y el universo entero...
Él...
sufre insomne por su corazón roto, su mala suerte,
triste... no espera nada, ni quiere...
(Para él no soy sino alguien más. Sin importancia)
Y aunque hace poco que está a mi lado en la distancia,
es como si hubiera nacido conmigo.
...Y entonces llegó...
...él es único para mí en el mundo...
viernes, 13 de junio de 2008
hoy ha sido... otro día más...
Me siento sobre la cama, con mi mano derecha sobre mi corazón, notando que late acelerado...
Durante un rato prefiero quedarme quieta, sintiendo la soledad, el silencio de la noche, mi respiración...
Seguidamente me levanto a por un poco de agua, tengo sed...
Pero tengo que pasar por el baño... necesidad absoluta, mirarme la espejo... porqué?
Martirio... sufrimiento... la necesidad de apuñalarme siempre...
Es ver mi imagen y hundirme... tocarme y odiarme... a veces todo lo contrario...
En fin, para qué discutir conmigo misma, es lucha perdida a veces...
Hoy es una de esas veces...
Así que decido ir a la cama, taparme y cerrar los ojos, que pase el tiempo...
... el suficiente como calmar este torbellino interno...
y después, al cabo de unas cuantas horas, abro los ojos...
y ya ni paso delante del espejo, considero la realidad, me considero a mi y comienzo mi día...
y como cada mañana...
Me digo...
Hoy es un buen día, hoy puede ser ese día que decida cambiar y dar un giro de 180º...
Quizá, quién sabe...
jueves, 12 de junio de 2008
A día de hoy...
Escribir aquí es una necesidad de mí, una especie de reto, terapia o planteamiento.
Lo veo a modo de lienzo en blanco, dispuesto a recibir, desde lindas pinceladas hasta rasguños profundos... quiero exteriorizar y compartir con quien así lo decida todas mis dudas que puedan quedar sin respuesta, plasmar ideas efímeras que se quedan ahí, planeando en mi cabeza; ideas o más bien convicciones semipermanentes; exponer opiniones, algunas irrelevantes, otras esenciales...
Componiéndose de esta manera...
...un trocito de mí para ti...