lunes, 4 de agosto de 2008

me faltas...

Recuerdo cuando llegaste en aquella caja vieja de zapatos agujereada... fue un amigo quien te salvó de las garras del destino, del taller que pretendía un exterminio colectivo de tu especie... recuerdo el momento de abrir aquella caja... me asomé y... allí estabas; arrinconado y asustado... eras tan poca cosa... te recogí entre mis manos con delicadeza, ya que eras muy frágil... sonreí porque apenas cabías en la palma de mi mano... entonces fue cuando nuestras miradas se cruzaron por primera vez... temblabas, de miedo, de frío, de hambre, de nostalgia... empezaste a maullar... te asusté demasiado? lo siento... quise arroparte entre mis brazos, darte cariño... como tu llegada fue inesperada, rápidamente tuve que ir a comprarte comida, manta, un cojín... me sentía nerviosa, contenta y también con un poco de miedo, porque no sabía si iba a saber cuidarte como te merecías.
Apenas contabas con semanas de vida...
Te desparasité, vacuné y fui curando esas heridas que tenías y que con la suciedad que llevabas encima estaban ocultas. Claro, tuve que darte un baño y para mi asombro te encantó... en ese instante apareció tu verdadero pelaje, y comenzaste a ser tú...
Aún me vienen a la memoria aquellas madrugadas sin fin cuando te preparaba biberones, de contar las horas entre toma y toma, de regañarte y educar tus maneras... fueron tiempos de sueño y cabezadas frente a la televisión...
Cada mañana me levantaba con la ilusión de verte, de alzarte en el aire, de abrazarte y notar el calorcito de recién salido entre mantas. Más adelante eras tú el que venías a despertarme, poniéndote sobre mi barriga puntualmente a las 7.
Creciste fuerte, sano y conservando el carácter rebelde que supiste desarrollar en apenas 50 metros cuadrados. Tuviste paciencia con nosotros los humanos... fuiste amigo, familia, orador, alegría en mis alegrías, guardián de mis lágrimas, supiste escuchar y también aconsejar... me diste tus buenos ratos y me desesperaste con tus manías... fueron años muy especiales para mi, estuviste siempre a mi lado...
Sabes? no existe ser que mirándome a los ojos supiera lo que en esos momentos necesitaba...

excepto tú...
Ahora, mis ojos se inundan de lágrimas recordándote... resbalan por mis mejillas... me cuesta seguir... mucho... siento pena, dolor, silencio... y culpabilidad...
Qué difícil cuando te ponen entre la espada y la pared... porqué me hicieron elegir? te sacrifiqué por amor y en ese momento sé que me crucifiqué.
Creo que jamás he sufrido tanto con una despedida... te abracé durante minutos interminables, te miré y hablé por horas... lloré, imploré, grité en silencio... ese día no comí, sólo me agazapé en un rincón y me quedé así por tres días...
Sé que ahora vives libre, con otros de tu especie... que puedes saltar setos y cazar a tu antojo lo que entre cuatro paredes no pudiste sino soñarlo.
Muchas veces pienso en ti y sonrío porque estás bien...
Pero ahora que escribo no puedo evitar sentir esta opresión, no puedo detener esta catarata de lágrimas y de añoranza por ti... necesitaba plasmarlo, necesitaba convencerme que no fui egoísta dejándote ir... sólo espero verte una última vez antes de que te vayas definitivamente, algún día...
Te quiero por siempre mi fiel amigo...


8 comentarios:

Unknown dijo...

Volveré muy prontito. tengo mucho mas... no paro de darle al coco! jejeje mil besos!! y gracias por los animos! ;)

**_AlwaysCinderella_** dijo...

Hola!!

Se nota que le tenias muchísimo aprecio a ese pequeño ser que compartía los días contigo. Si supiera leer seguro que te agradecía la dedicatoria desde donde esté.

Un saludo!!

P.D: Es un blog muy bueno, te felicito!

Esther dijo...

Hola Missi :)

Qué super bonito y tierno relato. Tb me hiciste recordar cosas. Tb tuve un gato de pequeña, que encontramos, metido en una cajita de zapatos. Pero, no me lo pude quedar porque ya tenía dos perras y mis padres no querían más. Luego las dos se murieron de la misma forma. Tb tuve durante unos días un perro que no podía convivir con el perro que tengo ahora y tuvimos que dejarlo en buenas manos. Tb lloré por él pero, al menos sé que alguien lo adoptó y que está bien. El perro que tengo es adoptado tb y lo adoro: el pobre estaba solo, y dijeron que apenas comía y estaba sucísimo. Ahora está muy feliz y es un encanto, aunque siempre ha sido un loco. No lo cambiaría por nada del mundo. Tb tuve por unos días una paloma que me encontré en un parque y la estuvimos cuidando porque tenía una herida en la pata... ...no podíamos tenerla en un piso, así que luego conocíamos una chica cuyo hermano tenía un palomar y se la dimos.

Las despedidas que más sentí fueron las de mis últimas perritas, sobre todo de la última que murió que estuvo aún más conmigo. Estuve varias noches llorando. Ellas me acompañaron durante casi toda mi infancia. A veces aún he soñado con ellas, como si algo me dijera que aún están ahí, como que se quisieran manifestar.

Y es que estos animalitos creo que son de los mejores amigos que se pueden tener, son pequeñas "personitas": ellos jamás te fallarán ¡Son adorables!

Saluditos.

missi dijo...

xivirifláutic,
tengo ganas de pasarme por tu blog para descubrir con que nueva maravilla nos obsequias esta vez...
se te echa en falta, claro, pero por otra parte... un descansito te viene bien... y a mí, porque me gusta analizar tus escritos y con ello, mi cabecita no hace más que sacar humo... por si acaso, un tiempecito de relax le ayudará a recuperarse ^^

alwayscinderella,
gracias por su visita y por haber dejado tu huella por ese humilde blog.
muchas veces he sobrevolado por el tuyo, pero no me he parado realmente a saborearlo debido a mi tiempo libre inexistente... pero le seguiré la pista, créeme.

esther,
me alegro que hayas compartido tu historia en este trocito, es tan tierna... muy especial... gracias!
es cierto, los animalitos son pequeñas "personitas"... y si eres alguien muy sensible, se acentúa el apego, cariño y uniones que puedan arraigar en tus relaciones con ellos... son geniales, a que si? ^^

muchas gracias por haberos detenido un ratito en este lugar, antes de continuar con vuestro paseo.

miabichucho dijo...

Missi, mi vida, ...solo te digo que igual que tratas con tanta delicadeza al resto del mundo, sea persona, animal o cuadro, color o palabra, la vida te da a ti esa sensibilidad tan y tan especialidad, que tanto te hace sufrir a veces, pero que te hace tan única.
Te quiero muchisimo, siempre, y te envidio sanamente, por ser como eres, por tu dulzura, úsala y deja que los demas se acerquen a darte un abrazo, nos acerquemos a empaparnos de tu amor y darte nuestro cariño....igual que me has dicho tu, "cuan hipocrita parezco...cuando solo utilizo palabras que no llevo a los hechos, ..." (pero tu sabes los motivos, y los venceremos)
Un besazo enorme, y me encanta ver que has salido un poquito de tu bloqueo, escribes genial. Gracias mi niña, por todo lo que me das siempre.

Anónimo dijo...

... Dejaste en la calle a un animal que ha crecido en una casa¿???

No puedo creerlo. Espero haberlo entendido mal.

missi dijo...

anónimo:
no fue así... de hecho, sólo de pensarlo me recorre un escalofrío por la crueldad que supone "dejar en la calle", sinónimo de "abandonar", a un ser vivo...
es pocas palabras... me lo llevaron a una protectora de aquí donde los cuidan, les dan cobijo en recinto vigilado, comida, están con los de su especie... esta protectora se encuentra en pleno monte, así que es beneficioso...
espero haberte aclarado un poquito la situación.

un saludín!

Anónimo dijo...

Si, me la has aclarado mucho. No podian creerlo, por eso tuve que preguntartelo.

¿Donde esta esa protectora? Nunca esta de mas conocer uns itio donde los acepten, teniendo en cuenta que hoy en dia estan todas a tope y te andan mandando de una a otra cuando encuentras un animalito por la calle...